Happiness

Si alguien me preguntaba en el 2007, después de que Johnny Craig se había ido de Dance Gavin Dance, si iban a ser capaces de hacer un álbum pasable sin la ayuda del cantante, la respuesta iba a ser que no. Obvio que había un par de elementos en la música que los distinguía de las bandas contemporáneas del género, pero los gritos y letras de Craig eran lo único que salvaba a la banda de ser completamente aburrida e igual a cualquier otra cosa que haya escuchado. Al parecer, la banda contó con la ayuda del nuevo cantante Kurt Travis, no sacaron un disco pasable nada más, sino que también se re inventaron así mismos y rompieron todas las desilusiones.

La voz de Travis es casi comparable con la del cantante anterior, la música y las composiciones pasaron por todo un proceso de renovación, y la banda en sí suena mucho más concentrada. Combinan todo lo que se puede llegar a encontrar en el género del posthardcore y lo mezclan con nuevas influencias que pueden llegar a ser hasta divertidas, novedosas y muy faciles de escuchar, superando los gritos.

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